Dicen que usar popotes es un ejercicio bueno para que los niños aprendan a hablar más rápido, pero a menos de que lo único que tomen sea agua sola, la limpieza de los popotes puede ser un verdadero dolor de cabeza.
Para lavar bien los popotes de los vasitos de los niños pueden usar limpia pipas, que pueden encontrar en cualquier papelería o tienda de manualidades. Con eso pueden llegar a todo el popote y limpiarlo bien para que no le queden restos de lo que los niños se toman. Además, puedes cambiar el limpia pipas seguido para que no se acumule la suciedad en éste.