¿Qué hacer mientras estas embarazada?

Estar embarazada de nuevo me pone a pensar mucho en lo que fue mi primer embarazo y todo lo que me hubiera gustado saber o hacer en ese entonces. Esto es lo que voy a hacer en este embarazo:

Jime embrazada de Valeria_Fotor

1. Ir al salón de belleza antes de que nazca la bebé.

Justo antes de que nazca mi bebé me voy a meter al salón de belleza, me voy a hacer manicure, pedicure, me voy a cortar el pelo, un facial, etc.

Suena muy banal, suena muy trivial, pero cuando tienes un bebé recién nacido no tienes tiempo para nada y si tienes mucho con qué lidiar (desveladas, horarios y rutinas nuevas en la casa, cuidados extensivos para un bebito, además ahora tendré el tema de los celos de un hermano mayor, etc). Un tema que si puedes controlar un poco más es cómo te sientes contigo misma.

Me acuerdo mucho que cuando tuve a mi primer bebé además de todo el agobio que implicaba ser mamá primeriza me sentía la más fodonga y fachosa del mundo. Lo cuál no ayuda mucho a los ánimos.

2. Ve buscando un look cómodo en el que te sientas bien.

A mi lo que me pasó los primeros meses en que tenía ya a mi bebé en casa era que me sentía mega fodonga porque no te da tiempo a veces ni de bañarte. No sabía cómo peinarme si no era con secadora o plancha (para lo cuál es muy probable que no tengas tiempo todos los días).

Así que mi sugerencia es buscar un look con el que te sientas cómoda, que sepas que será rápido y práctico, y que no te haga sentir la más fodonga del mundo. Si piensas amamantar busca un look que incluya blusas abotonadas.

3. Hablar con tu pareja sobre cómo van a ser su relación ahora.

Un bebé en la casa cambia la dinámica de pareja, te guste o no. Ya no hay tanto tiempo para la pareja, ya no puedes ir al cine, al teatro, a cenar, al bar, a fiestas, salir con amigos, etc. Es un hecho y lo tienen que aceptar.

Lo único que se puede hacer es platicarlo y tratar de encontrar un plan con el que se sientan cómodos los dos, pero un plan que sea realista. Tal vez decir “una vez cada 15 días le encargamos el bebé a los abuelos y nos salimos a comer”, o “en cuanto se queden dormidos los dejamos encargados con alguien y nos salimos a cenar”.

4. Arregla todos los temas pendientes que tengas con tu pareja antes de que nazca el bebé.

Platica con tu pareja cualquier tema pendiente que tengan por resolver, porque cuando el sueño y cansancio se acumulan (y se van a acumular), puedes explotar en cualquier momento y sacar rencores y temas que no tienen que ver con lo que realmente te agobia en ese momento.

5. Y finalmente, no dejes que la gente te abrume con el “ahora si vas a ver lo que es bueno” o “duerme ahora que puedes”

Y si, en realidad si es un cansancio como nunca lo has sentido, pero ¿de qué te sirve preocuparte de eso desde ahorita? No es como que puedas dormir hoy todo lo que no vas a poder dormir los siguientes meses, ¿no?

Además, cada vez que tu bebito se acurruca en tus brazos, te agarra la mano o te empieza a sonreír, van a valer la pena los desvelos y malos ratos.

¿Qué más harías mientras estas embarazada?

Lo que no tenías que saber antes de ser mamá

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Estoy esperando a mi segundo bebé, y reflexionando un poco en como cambió mi vida desde que llegó mi primer bebé estuve pensando en todas aquellas cosas que no sabía antes de ser mamá.

Si, están las cosas obvias como: cómo cambiar un pañal, cómo esterilizar una mamila o cómo dormir a un bebé, pero me refiero a lo que no te imaginabas que tenías que saber.

Años y años yendo a las mismas plazas y hasta que no tuve un bebé no supe dónde estaban las rampas ni los elevadores, y ¿qué creen? no siempre están en lugares muy accesibles, no siempre son muy grandes, y casi siempre están repletos de gente que no necesita un elevador realmente.

Lo peor son las plazas que sólo tienen rampas eléctricas y creen que eso es suficiente para subir una carriola. La subida no es tanto problema, pero cuando se trata de bajar con una carriola que tiene un bebé, más todas las bolsas de las compras, más la pañalera, más todo lo que le puedas colgar, se vuelve una hazaña.

Y hablando de hazañas con la carriola, hasta que no eres mamá no sabes lo realmente angostos que pueden ser los pasillos en los centros comerciales, e irónicamente, principalmente en la zona donde venden las cosas de bebés. Y eso que yo llevo una carriola sencilla, de un solo bebé, no sé cómo se pueden mover quienes manejan carriolas de más de un bebé.

¿Y qué tal los baños? Como adulto de vez en cuando necesitas ir al baño en una plaza o en alguna tienda. Pero si vas con un bebé SIEMPRE tienes que saber dónde está el baño que tiene cambiador, porque esa es otra, no todos los baños tienen cambiador. Y mucho peor cuando se trata de ir con un niño que está dejando el pañal.

La frase “Tiene 10 minutos para salir” después de pagar el boleto del estacionamiento no suponía nada en particular antes de tener bebés. Pero ya que tienes bebés 10 minutos son una carrera contra el tiempo: encuentra tu coche, encuentra las llaves, baja al bebé, acomódalo correctamente en la sillita, dobla la carriola, acomódala en la cajuela junto con todas las compras, encuentra de nuevo las llaves del coche, encuentra el boleto del estacionamiento, sal del estacionamiento y todo en 10 minutos.

Y hasta que no te conviertes en mamá no te das cuenta de tooooodos los enchufes que hay en casa. Te vuelves una experta en detectar posibles zonas peligrosas en cada lugar al que vas, y encuentras todos los enchufes que no están cubiertos (increíble pero hasta en el Gymboree los he encontrado).

 

¿A ustedes no les pasó? ¿Qué más han descubierto en esta etapa de la maternidad?