La pesadilla de quitar el pañal: 9 lecciones aprendidas

41pd6Us6SQL._SL500_AA300_

Pues todavía no puedo cantar victoria, pero llevo ya 5 meses de haberle quitado el pañal a mi niño y cada día estamos más cerca de lograrlo. No han sido nada fáciles estos 5 meses, en este tiempo lo he intentado todo, hemos tenido días muy buenos y días muy malos, y si bien no tengo el secreto para que los niños dejen el pañal en 3 días, si tengo los siguientes 9 consejos prácticos que les pueden ayudar si están en esta etapa.

  1. Salir con cambios de ropa Y bolsas de plástico

Al principio salir a la calle es uno de los temores más grandes que tienes. “¿Qué voy a hacer si se hace pipi y estoy en la calle?” Mi consejo: respira profundo, tómalo con calma y sal preparada con cambios de ropa (pantalón, calzón, calcetas y zapatos), pero también bolsas.

Cuando necesites hacer uso de los cambios de ropa, la ropa que sale de la pañalera esta seca, pero la ropa que entra va a estar mojada (y no de agua). Lleva bolsas del super para meter la ropa mojada y que no ensucie lo demás.

  1. Lava la ropa sucia lo más pronto posible

No digo que laves a profundidad cada prenda que se ensucia, cada vez que hay un accidente (si haces eso podrías pasar días enteros lavando ropa), pero si que trates de enjuagarla al menos, en cuanto te sea posible. De lo contrario el olor a pipi empieza a impregnarse poco a poco en toda la ropa.

  1. Ten una cubeta en el baño

Para no correr al cuarto de lavado cada vez que haya un accidente pon una cubeta en el baño del niño. Cada vez que haya un accidente puedes enjuagar la ropa en el lavabo y echarla a la cubeta. Cuando la cubeta se llena (y puede pasar), o el día se acaba, llevas toda la ropa en una sola vuelta al cuarto de lavado.

  1. Si se le impregna el olor a pipi a la ropa

Si la ropa ya tiene impregnado el olor a pipi lo que puedes hacer es meter una lavadora con una taza de vinagre de manzana en lugar de detergente, y cuando termine el ciclo, poner otro ciclo ya con detergente normal. Es importante que si la ropa sigue con olor a pipi NO la metas a la secadora, cuélgala para que se seque. El calor de la secadora sólo hará que se impregne más el olor.

  1. Crocs

No soy nada fan de los crocs, pero en la escuela me pidieron que mandara al niño con estos zapatos mientras esté en entrenamiento. Esto sirve para no tener que cambiarle los zapatos si tiene accidentes. Este tipo de zapatos ya solo se limpian con una toallita húmeda en caso de accidentes.

  1. Teflón de tela

Para no tener que usar crocs todo el tiempo, puedes ponerle teflón de tela a los tenis. De esta manera si hay accidentes no son tan graves, y el olor no se impregna tan fácil.

Igual puedes usar el teflón en sillones y sillas.

Yo lo consigo en Home Depot.

  1. Pantalones con resorte, nada de cinturones, ni tirantes.

De lo que se trata es de que sea lo más fácil y rápido posible bajar y subir pantalones.

  1. Papel de china en el baño

¿Te ha pasado el típico: “ya vamos a salir, ve al baño”, y el niño contesta tajantemente “no quiero ir”, aunque tu sabes que si tiene que ir?

Para estos casos puedes echar papel de china de colores en su baño para hacer más “emocionante” la visita al baño. Puede ver cómo cambia de color el agua, y puedes tener varios colores para que él escoja el que más le guste.

  1. Beneficios de ser grande (no solo responsabilidades)

Con la llegada de la bebé el tema de los accidentes de pipi se incrementaron notablemente. El mejor tip que me pasaron para contra restar esto: que tenga beneficios ser el grande, no solo responsabilidades. Por ejemplo, “la bebé quiere jugar con la bici, pero no puede porque es chiquita, tu si puedes porque ya eres grande”.

Buena suerte, espero que estos consejos hagan menos pesada esta etapa.

Los errores más comunes de los papás primerizos

El otro día me encontré en BuzzFeed una nota muy divertida (y muy cierta) sobre los errores más comunes que comentemos los papás primerizos, y aunque no me ha tocado todavía pasar por todos ellos aquí les comparto algunos sobre los que si tengo algo de experiencia.

1. Comprar demasiados pañales de etapa «Recién nacido» 

A veces una se emociona porque hay alguna promoción o descuento y no le calculamos muy bien cuánto tiempo más usaran una etapa de pañales.  La buena noticia que yo tuve es que al comprar los pañales por caja en Costco, si la caja está cerrada se pueden devolver.

2. Usar los pañales chicos de todas formas

Si ya no se pudieron cambiar esos pañales que ya no les quedan, mejor regálenlos.  Si el pañal es muy chico no va a tener la absorción que el bebé necesita en la nueva etapa, y si le queda muy grande no se ajusta bien, y créanme, no les van a gustar los accidentes que pueden tener con un pañal más grande.

3. Lastimar el dedito de tu bebé cuando le estás cortando las uñas

Afortunadamente no me ha tocado vivir esto nunca (espero que no me pase), pero un gran consejo que recibí de una enfermera es que con la punta de tu pulgar jalas un poquito la piel del dedito hacia atrás. De esta forma la uña queda más expuesta y fácil de cortar sin llevarte un pedazo de piel en el intento.

4. Dejar que tu bebé juegue con tu teléfono si antes ponerle el «Acceso guiado»

Esta es típica, dejas que tu bebé juegue un ratito con tu iPhone o tu iPad porque le bajaste una aplicación especial para bebés, y cuando menos te das cuenta ya está mandando un mail, publicando algo en tu cuenta de Facebook o borrando tus fotos. En el iPhone y iPad existe una funcionalidad que se llama «Acceso guiado» que hace que al dar tres veces click sobre el botón de inicio el aparato queda bloqueado y sólo se puede usar esa aplicación. Lo pueden activar en Ajustes > General > Accesibilidad > Acceso guiado.

También tengan cuidado si les dan el celular bloqueado. Resulta que el iPhone y iPad tiene una opción  de configuración donde si  alguien intenta meter una clave incorrecta diez veces el contenido se borrará automáticamente. ¡A mi marido ya le tocó vivir esta! Si su teléfono tiene esta modalidad lo pueden desactivar en Ajustes > Código > Borrar Datos.

5. Mover demasiado fuerte a tu bebé para asegurarte de que sigue respirando

Si, es algo inevitable, como papá primerizo quieres ir a asegurarte que tu bebé está respirando cada minuto que está dormido. En lugar de despertarlo puedes poner un dedo justo debajo de su nariz para sentir la respiración.

6. Dejar solo al bebé en la cama … aunque sea sólo un minuto

Ni modo, si necesitas dejarlo en algún lugar y no tienes un corralito o su cuna cerca lo mejor es dejarlo en el piso. Suena muy feo, pero es preferible dejarlo un minuto en el piso a que se pueda caer de la cama o el cambiador. Nunca, por ningún motivo dejen a su bebé en un lugar en el que se pueda caer.

7. Olvidar meter un cambio de ropa en la pañalera

Y típico, el día que la necesitas es el día que se te olvidó. Yo lo que hago es que siempre tengo un cambio de ropa en la pañalera y  otro en el coche, y no los muevo de ahí. El día que uso esos cambios, saco la ropa sucia de la pañalera e inmediatamente pongo un nuevo cambio que se queda ahí hasta el día que lo necesito. Si van muy seguido a algún lugar, por ejemplo la casa de los abuelos, pueden tener ahí otro cambio de ropa.

8. Jugar con tu bebé a subir y bajar cuando acaba de comer

Sobre todo si el bebé tiene reflujo. Esta si me pasó. Acabas de darle de comer al bebé y quieres jugar con él, lo cargas y lo subes y bajas en tus brazos, mientras vas diciendo «aaaaahhhhh», y en una de esas, una extraña combinación de papilla y leche aterriza, nada más ni nada menos que … ¡en tu boca abierta! Es mejor dejarlos tranquilitos un rato después de que comieron.

9. Olvidarte de ponerle una toallita encima al niño mientras lo cambias

A veces puedes lograr el cambio de pañal sin que se hagan pipí mientras lo haces, pero muchas otras veces justo cuando les abres el pañal hacen pipí. Para que la pipí no llegue a tu ropa (o a tu cara)  puedes poner una toallita húmeda en el pene mientras haces el cambio de pañal.

Venden también unos «cucuruchos» de tela en algunos lugares para esto. Yo la verdad los probé y prefiero mil veces más la toallita. Estos «cucuruchos» son de tela y son muy pequeños, así que muchas veces se pueden salir de su lugar, además de que si hay algún «accidente» los tienes que lavar. Las toallitas húmedas me parecen mejor idea porque son más pesadas y no se salen de su lugar tan fácil, además de que al terminar ya sólo la tienes que tirar.

10. Dejar una bebida sin tapa al alcance de tus niños

Si, la vida cambia totalmente al tener un bebé, y una más de las cosas a la que tienes que ponerle atención que antes no tenías que cuidar es dónde dejas tus vasos y tazas. Particularmente cierto cuando se trata de una bebida caliente. Es impresionante el alcance que pueden tener los niños chiquitos, yo sugeriría dejar las bebidas en el centro de la mesa.

11. No pedir ayuda

Es importantísimo dejarte ayudar, sobre todo cuando el bebé es muy chiquito y a penas estas entendiendo cómo cuidarlo. Y principalmente cuando estas tan cansada que todo se te empieza a olvidar. Hay que dejar el orgullo o la pena a un lado, acepta cualquier ayuda que te ofrezcan.

12. Desvelarte sin una buena razón

Deja a un lado el Candy Crush, la serie de televisión o el libro que estas leyendo. Si bien eso de «cuando el bebé duerme, tu duermes» no siempre puede suceder, aprovecha cada minuto de sueño que puedas tener.Si no lo haces lo vas a lamentar a eso de las 2 a.m., 4 a.m., 6 a.m……

13. Comprar demasiada ropa de bebé

¿Alguna vez han notado que las tallas en ropa de bebés van de 0 a 3 meses, de 3 a 6 meses, de 6 a 9 meses, etc? Es por una razón: los bebés crecen demasiado rápido. Ya cuando llegan al año las tallas empiezan a ser: 12 a 18 meses, 18 a 24 años, 2 años, 3 años, etc. Después del año ya no crecen tan rápido como cuando eran bebitos. En conclusión: no compres demasiada ropa pequeña. Lo que puedes hacer es que si hay un modelito que te encantó lo que puedes hacer es comprar ese mismo en diferentes tallas.

14. Pegarle accidentalmente a tu bebé en la cabeza con el marco de la puerta mientras lo cargas

Sobre todo cuando empiezan a crecer y ya perdiste noción de que tu pequeño bebito ya no es tan chiquito.

15. Salir de casa sin la cantidad suficiente de pañales

Lo más fácil es siempre dejar unos cuantos pañales y una bolsa de toallitas húmedas en el coche, y en los lugares a los que vayan con más frecuencia, como las casas de los familiares. Y en último de los casos, siempre habrá una farmacia o súper cercano al que puedan ir corriendo.

¿Qué les parecen? ¿Qué otras cosas les pasaron?

Aquí pueden ver la lista completa de BuzFeed: http://www.buzzfeed.com/mikespohr/19-rookie-mistakes-parents-make

Y aquí pueden encontrar la «Guía gráfica para padres» completa: http://www.cibermitanios.com.ar/2008/02/guia-grafica-para-padres-primerizos.html